Motoazadas
Nada como una motoazada para que arar la tierra se convierta en un cómodo paseo. Como casi toda herramienta, la opciones son muchas por lo que queremos ayudarte a filtrar los modelos que merecen la pena. Una vez tengas claro qué tipo de alimentación te viene mejor, elige una de las comparativas.
Comparativas de motoazadas según alimentación
Aunque las motoazadas se encuentran en distintos modelos, las prestaciones no dejan de ser un valor numérico y los accesorios suelen ser parecidos. Antes de todo eso está el elegir cómo se alimenta la máquina porque no hay una elección perfecta para todos, sino que depende de cada caso. Puedes encontrar las siguientes:
- Eléctricas: Las más pequeñas y fáciles de manejar, pero con potencia suficiente a pesar de ser compacta. Aunque son las ideales para los que se inician, hay modelos más generosos en cuanto a prestaciones y tamaño por lo que no creas que solo sirven para pequeñas áreas. También son muy silenciosas, de fácil mantenimiento y con autonomía infinita, pero claro, necesitas dónde enchufarlas.
- A gasolina: Al tener el depósito y motor de combustión, tienden a ser máquinas más pesadas (lo que puede ayudarte en terrenos duros) y grandes. La mayor diferencia es que sirven para trabajar suelos muy duros o abarcar extensiones muy amplias gracias a su autonomía renovable con solo llenar el depósito. Como contras, necesitan un mantenimiento superior y son bastante ruidosas.
- A batería: El motor es como el de los modelos eléctricos, con todas sus ventajas, pero añadiendo la autonomía que ofrecería una de gasolina. Las baterías se cambian rápido si tienes recambios y te evitas estar atado al clave. Es más raro verlas y suelen ser más caras que las que llevan cable por el coste de la batería.
Motoazada o motocultor: diferencias
Un error bastante común es utilizar indistintamente las palabras motoazada y motocultor como si fueran intercambiables. Es cierto que son herramientas muy parecidas, pero existe una diferencia fundamental: las ruedas de un motocultor tienen tracción mientras que una motoazada directamente puede no tenerlas o si las tiene, son solo un apoyo.
La anterior es la única diferencia que tiene que cumplirse sí o sí, pero además hay ciertos aspectos frecuentes en cada tipo:
Motoazada
- Se utilizan más bien en terrenos pequeños o medianos porque sin la tracción de las ruedas son más cansadas de utilizar.
- Suelen ser más pequeñas y ligeras.
- Pueden tener ruedas o no, pero no te ayudan al carecer de tracción. Tú serás quien empuje la máquina aunque las fresas y su rotación te ayuden un poco.
- Habitualmente son más compactas y fáciles de guardar gracias a partes plegables, algo más sencillo al no ser autopropulsadas.
Motocultor
- Aprovechando que se autopropulsan, también suelen ser más grandes y pesados.
- Lo anterior hace que se utilicen con más frecuencia en terrenos grandes y en suelos más duros ya que el propio peso facilita hundir las cuchillas.
- Siempre llevan ruedas y estas cuentn con tracción.
- Requieren de un espacio de almacenamiento mayor ya que las ruedas no suelen plegarse y son más grandes que cuando las tiene una motoazada.
Como ves, ambas herramientas desarrollan el mismo trabajo, pero dependiendo de cada situación particular, tendrías que decantarte por un tipo u otro. Al principio de la página tienes comparativas de ambos agrupando los modelos según el tipo de alimentación que utilizan por lo que no te faltarán opciones para elegir. ¡Esperamos que te sean de ayuda!